Luis Alberto Angulo-Alquimia del amor

El siglo XIX concluyó en Venezuela con Cipriano Castro en el poder político; el mismo fue derrocado por su hombre de confianza, Juan Vicente Gómez, quien con apoyo de los Estados Unidos de Norteamérica se mantuvo en el poder absoluto, en una larga tiranía de 27 años (sin sumar su tiempo en el castrismo); consolidando el llamado régimen político andino, hasta muy adentrado el siglo XX, con las gestiones presidenciales de Eleazar López Contreras e Isaías Medina Angarita, oficiales de carrera formados en el gomecismo.

Isaías Medina Angarita fue depuesto por un golpe cívico-militar en la llamada “Revolución de Octubre”, con Rómulo Betancourt al frente; que declara un proceso constituyente y realiza elecciones libres, democráticas y secretas, imponiéndose la presidencia constitucional del escritor Rómulo Gallegos, cofundador del partido Acción Democrática.

Posteriormente, un golpe militar contra Rómulo Gallegos frustra el proyecto político emergente y retrotrae al país, para decirlo de alguna manera, a la ambición hegemónica conservadora expresada en el “ideal nacional” del Coronel Marcos Pérez Jiménez, derrocado el 23 de enero de 1958 por otro golpe cívico-militar que, ciertamente, no fue rechazado por el gobierno y las petroleras yanquis.

El régimen de gobernanza, establecido a partir de ese momento y durante cuarenta años, conocido como “Pacto de Punto Fijo” (un acuerdo de cúpulas para alternarse el poder político y repartirse las riquezas nacionales, desarrollando grandes grupos económicos a la sombra del Estado y generando una inmensa marginalidad social ), colapsa estruendosamente a partir de los años ‘80 y produce una rebelión social al final de la próxima década, que conlleva a la matanza de centenares de civiles en el “Caracazo” (27 y 28 febrero 1989) y al frustrado golpe militar encabezado por Hugo Chávez en 1992.

Chávez, aprisionado con su oficialidad en Yare durante dos años y medio, logra trasmitir al país su mensaje político y convertirse en la fuerza emergente que ganará las elecciones presidenciales para dar inicio a un proceso constituyente refundante de la República; un proyecto abierto de inclusión social que devela al pueblo como sujeto protagónico e inaugura una nueva manera de hacer revolución que mantiene en vilo al poder fáctico neocolonialista que ha hecho lo imposible para detenerla durante treinta años en los que los gobiernos bolivarianos, pese a la inmensa agresión externa e interna, rompen con la tradición anterior, destierran la consuetudinaria suspensión de garantías constitucionales y establecen, de esa manera, un continuo Estado de Derecho.

 

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Coda:

Nicolás Maduro-presidente de VenezuelaTenemos entonces que la primera mitad del siglo XX fue prácticamente de dictaduras andinas, y la segunda mitad, de la adeco-copeyana del “Pacto de Punto Fijo”. Del siglo XXI tenemos un cuarto y, de ese cuarto, la primera mitad corresponde a Chávez y a Nicolás Maduro, con el que el chavismo copará la primera mitad del siglo XXI.

Maduro conmemora el Bicentenario de Bolívar que despertará de nuevo, como lo hace cada cien años en ese proyecto inclusivo, abierto y dinámico del sujeto pueblo. A pocos días de las elecciones debemos enfatizar que la mayor garantía constitucional que tiene este país en las elecciones es Nicolás Maduro Moros, candidato del bolivarianismo del siglo XXI en Venezuela.

 

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Luis Alberto Angulo [Rivas]. Nació en Barinitas, estado Barinas (VEN), en 1950. Coterráneo de los poetas Enriqueta y Alfredo Arvelo Larriva. Autor de las sumas: Antología de la casa sola (Fundarte, 1982), Fusión poética (Universidad de Carabobo, 2000), La sombra de una mano (2005), Antología del decir (2013), y Coplas de la edad ligera (2021), títulos publicadas por Monte Ávila Editores, colección Altazor. Prologa la edición en vida de la Obra poética completa de Ernesto Cardenal (Editorial Patria Grande, Buenos Aires, Arg. 2008).
Premio del IV Concurso Internacional de la revista Poesía (UC), otorgado anteriormente a: Jim Seguel, Arnaldo Acosta Bello y Eli Galindo. En Valencia, ciudad donde reside desde hace más de cincuenta años, ha sido columnista de los diarios Notitarde, El Carabobeño y Ciudad Valencia, jefe de redacción de la revista Poesía (UC) y director de las revistas Zona Tórrida (UC) y Redve (Red Nacional de Escritores de Venezuela). Ha realizado selecciones poéticas de: San Juan de la Cruz, Miguel Hernández, César Vallejo, Ernesto Cardenal, Enriqueta Arvelo Larriva, Teófilo Tortolero, Gelindo Casasola, Rómulo Aranguibel, Lubio Cardozo y Ana Enriqueta Terán.

 

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