¿Cómo es la Navidad en Venezuela? | José Luis Troconis Barazarte
Y hoy más que nunca, la Navidad en Venezuela comienza con el primer brillo en el cielo de octubre. No espera calendario ni permiso:...
Alicia o el país que se pliega | José Luis Troconis Barazarte
Lewis Carroll fue el seudónimo de Charles Lutwidge Dodgson, nacido en 1832 en Inglaterra. Fue matemático, lógico, fotógrafo y escritor, conocido mundialmente por Alicia...
“Microcuentos: Violeta Rojo y su manual para re-co-no-cer-nos…” por José Luis Troconis B.
En presente, siempre presente, porque Violeta vive en mí y en cada una de las letras que escribió y me escribió… Te quiero, mi...
«Hans Christian Andersen: el viajero sin patria» por José Luis Troconis Barazarte
Nació torcido, como si el mundo lo hubiese dibujado con la mano izquierda. Alto, desgarbado, con la tristeza en los hombros y una cara...
“Carlos Cruz-Diez: El toldo como sombra mestiza” por José Luis Troconis Barazarte
La ciudad no comienza en el plano ni en el decreto. Comienza cuando alguien extiende un toldo. No para cubrirse del sol, sino para...
«Tres colores para un solo estremecimiento» José Luis Troconis Barazarte
Yo he visto la poesía dividirse.No por forma.
No por rima.
No por escuela ni por siglo.La he visto partirse como se parte la...
“A la sombra de un caballo que comía jardines, una carta para ustedes” por...
Desde aquel día en sexto grado, cuando mi profesor de música, con un gesto de fe y esperanza, me deslizó un cuento en la...
Y si Shakespeare no fue Shakespeare» por José Luis Troconis Barazarte
A rose by any other name would smell as sweet.
Una rosa, con cualquier otro nombre, olería igual de dulce.
William Shakespeare
¿Y si Shakespeare no fue...
“El Bolívar de Manuela” por José Luis Troconis Barazarte
La historia camina con paso de espectro por los pasillos del archivo: no tiene rostro, pero sí perfume, sí temblor. Y allí, entre el...
“Ana Enriqueta: la maestra que se ocultó en la metáfora” por José Luis Troconis...
En esta segunda entrega de Ciudad en verso y prosa, no puedo avanzar sin volver la mirada —y el alma— hacia una mujer cuya...




















